Barcelona es una ciudad hermosa repleta de luz y color. Recorriendo sus calles, uno se da cuenta de que la historia y cultura siguen latentes. Los impresionantes monumentos, las interminables ramblas, las casas imperiales y sus estrechos callejones hacen de la ciudad un lugar imprescindible para incluir en la agenda de viajes. Sin embargo, esta metrópoli esconde otros emplazamientos no tan armónicos… Escondida entre la frondosidad de las callejuelas del Barrio Gótico, con escasa luminosidad y baja vibración, aguarda afligida una plaza que fue testigo de un terrible crimen durante la guerra civil española (1936-1939).
Se trata de la Plaza de Sant Felip Neri. Este lugar recibe el nombre gracias a la iglesia con la misma denominación, y de estilo barroco, que se encuentra en este mismo enclave. Allí tuvo lugar un fatal asesinato de 42 personas, la mayoría infantes, a causa de un bombardeo de la aviación franquista el 30 de enero de 1938. Las fachadas de la iglesia, así como la actual escuela —antiguamente,Casa del Gremio de Caldereros— y el Museo del Calzado —en el pasado, Casa del Gremio de Zapateros— preservan, todavía, los reductos de la metralla de aquel fatal bombardeo que acabó con la vida de los pequeños que fueron a resguardarse en el subterráneo de la iglesia y que fallecieron por la deflagración. La aviación fascista del bando sublevado destruyó, así mismo, el antiguo cementerio medieval de Montjuic del Obispo sobre el cual se cimenta la plaza. Pasado un tiempo, esta fue reconstruida por el arquitecto municipal, Adolf Florensa (1889-1968), quienadaptó dos fachadas renacentistas para poder crear los dos accesos a la plaza desde la Avenida de la Catedral y desde la Vía Layetana 3.
Lo cierto es que este punto geográfico marcado por la tragedia ha generado un ambiente sombrío, capaz de minar los ánimos de cualquiera. Es imposible no sentirse achacado si se piensa en el calvario que allí tuvo lugar. Un escenario desolador que conserva las cicatrices de la guerra pero que, ahora, florece con las risas y juegos de los escolares que irrumpen la plaza ajenos al pasado.
Esos lugares quedan impregnados de una energía particular que no todos logran captar. Gracias por este artículo. Un placer leerte.
Omar
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¡Gracias! Sí, aunque suene a cliché lo cierto es que el lugar ya tiene unas características especiales. Entra muy poca luz, se escucha el eco gente y se siente un ambiente bastante denso. Estoy seguro que tiene que ver con el pasado…
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Me gustaría conocerlo y sentir las vibraciones que hay ahí. Fui solo una vez a Barcelona, fue un ir y venir. Espero volver algún día. 😊👍🏽
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Si tienes la oportunidad hazlo. Además se encuentra en el Barrio Gótico que también es muy bonito para visitar, aunque este lugar pasa bastante desapercibido
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Apenas tenga la oportunidad lo haré. Quiero ir y conocer mejor Barcelona 👍🏽 Si voy te aviso y te invito a un café ☕️
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La verdad que a mí también me queda lejos, yo vivo en Valencia. Fue un viaje exprés, pero me hablaron del lugar y aproveché para visitarlo. ¡Igualmente si pasar por aquí nos tomamos uno!
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Ah ok ok. Yo vivo en Oliva, cerca de Gandía. No estamos lejos y de vez en cuando voy a Valencia. El café está más cerca 😊
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¡Perfecto! 👍🏻
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